Carrera al sosiego: inteligencia espiritual para deportistas. Por Francesc Torralba

Entrada libre hasta completar aforo

Sala 001

Slowly… Reivindicaciones de la quietud

Somos muchos quienes sentimos que nos falta tiempo. La tecnología ha multiplicado nuestras opciones y relaciones: ahora hay más que hacer y se espera de nosotros que lo hagamos antes. Con tanta dispersión, yendo tan rápido, ¿somos capaces de escuchar lo que el mundo tiene que decirnos? ‘Slowly… Reivindicaciones de la quietud’ es una actividad coordinada por Sebastián Escámez para La Térmica.

Después de que, en los años 80, se comenzara a hablar de distintos tipos de inteligencia, se desarrolló la teoría de la inteligencia emocional y, posteriormente, empezó a hablarse de inteligencia espiritual. Descontento con otras formulaciones, Francesc Torralba ha elaborado una teoría de la inteligencia espiritual como un conjunto de facultades entre las que se cuentan interrogarse por el sentido de la vida, tomar distancia respecto de las propias creencias, maravillarse ante el mundo, trascender lo conocido o la vivencia plena del ahora.

Además de beneficios físicos y psíquicos, el deporte permite el desarrollo de las virtudes asociadas a la inteligencia espiritual. Esto es muy claro en lo que respecta a superarse o conectar con el momento presente, pero es igualmente válido con referencia a otras destrezas. Francesc Torralba hablará de esto desde su perspectiva de corredor de fondo, ciclista y senderista.

Francesc Torralba es doctor en Filosofía y Teología. Profesor de Historia de la Filosofía Contemporánea y Antropología Filosófica Universitat Ramon Llull de Barcelona, compagina la docencia con el oficio de escribir. Ha publicado más de noventa libros, tanto de tipo académico como dirigidos al público en general. Algunos títulos relacionados con la temática de la charla son “El sentido de la vida” (2008), «Sosegarse en un mundo sin sosiego» (2009), «Inteligencia Espiritual» (2010), “Correr para pensar y sentir» (2015) e “Inteligencia espiritual y deporte” (2016). Su mayor afición es el deporte, en el que encuentra inspiración para su vida y su trabajo. Como corredor de fondo, ha participado en diversas maratones y croses de montaña. También le apasiona la bicicleta, alternando la de montaña y la de carretera, así como la escalada.